acabar es inexorable, me gusta el orgasmo

Necesito escribir al respecto. Sí, pero lo primero sería darme conciencia ó una advertencia: ¿por dónde empezar? Últimamente la noche es mi aliada y a la vez mi enemiga, aunque analizando los puntos que unen toda esta maraña debo decir que siempre fué así, como un comienzo y un fin que arrancan de la mano, entrelazados y sugestivos. Todo va a ir bien, en perfecta armonía pero la brecha que rompe ese mundo paralelo surge al mismo tiempo, acelerando el proceso en donde la armonía automáticamente se transforma en un caos masivo.
Lo hablé conmigo misma una vez, más de un millón de veces también.