Una lista absurda de interminables deseos encontrados que sin descaro se van complementando con nuestra intención de inocente perversidad.
Días de camas voladoras,
de vinos repetidos hasta el infinito
y whisky en el café.
Días de pasear en bici por la luna
y robos malinterpretados.
Días de otoño que buscan el calor de las orugas
y películas que fueron quedando por la mitad
pues las distracciones,
a veces,
se vuelven inevitables.
Días de camas voladoras,
de vinos repetidos hasta el infinito
y whisky en el café.
Días de pasear en bici por la luna
y robos malinterpretados.
Días de otoño que buscan el calor de las orugas
y películas que fueron quedando por la mitad
pues las distracciones,
a veces,
se vuelven inevitables.
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